¿Un Apple Watch 3 con batería mejorada es suficiente para seguir conquistando el mercado un año más?

Hace unas horas aparecían rumores de que el próximo modelo del Apple Watch que sería lanzado a finales de este año presentaría principalmente mejoras en la duración de la batería y el rendimiento del reloj. Esta nueva generación, que no sabemos si se apodará «Series 3» o iniciará una nueva nomenclatura, ofrecería básicamente más de lo mismo que encontramos en el actual Apple Watch Series 2 aderezado con una mejor autonomía y una mayor velocidad del sistema. ¿Es esto suficiente?

Aunque Apple se ha convertido en el mayor fabricante de smartwatch estrictamente -pues Fitbit acapara una gama de productos mucho más amplía-, lo cierto es que esta categoría de producto no está teniendo el despegue que tuvieron en su día los smartphones o los tablet. Las razones para ello pueden ser numerosas, aunque existe un acuerdo más o menos amplía para afirmar que estos nuevos dispositivos no ofrecen las suficientes ventajas como para pagar el precio que piden por ellos los grandes fabricantes.

El Apple Watch ofrece una experiencia superior al resto sin ser rompedora o revolucionaria como sí lo fue en su día el iPhone o el iPad. Apple ha conseguido hacerse con una buena cuota de mercado y se permite el lujo de vender su reloj inteligente a un precio superior al del resto de competidores, haciendo de su pequeño negocio -en comparación con el resto de sus líneas de producto- uno muy rentable.

Ahora bien, ¿hasta cuándo se puede estirar esto? Lo cierto es que cuando hablamos del Apple Watch lo hacemos completamente a ciegas, pues Apple todavía no ha desvelado un solo número desde el lanzamiento de su modelo original hace ahora algo menos de dos años. Tim Cook afirmó recientemente que el Apple Watch estaba vendiendo «increíblemente bien», pero seguimos sin conocer cifras oficiales que lo respalden o qué muestren su importancia en el negocio global de la compañía.

Apple Watch, ha llegado la hora de innovar

Innovar en el terreno de los smartwatch se hace tremendamente complicado debido a las numerosas limitaciones que impone el hardware. Incorporar nuevas funciones sin echar por tierra la autonomía de su pequeña batería es tremendamente complicado en estos momentos. Sin embargo, los smartwatch siguen sin una «killer-app» que los hagan atractivos para el gran segmento del público, e incorporar una aplicación para Respirar no lo va a solucionar.

Hace unos años parecía que la unión entre salud y dispositivos wearables era el futuro, poder acceder a las métricas y constantes más importantes de tu cuerpo desde tu muñeca es algo que se hace atractivo y en ocasiones necesario para muchos usuarios. Sin embargo, hasta el momento el Apple Watch tan sólo monta un sensor de ritmo cardíaco que, pese a ser más avanzado que el del resto de modelos de la competencia, todavía se queda muy cojo en cuanto a métricas de salud se refiere.

No sabemos por dónde irán los tiros en cuanto a la evolución del Apple Watch se refiere, aunque sin duda no parece una buena idea lanzar por tercer año consecutivo un modelo con el mismo diseño y mismas funciones más allá de una mejor autonomía (que seguramente siga sin llegar a los 3 días de uso) y un mejor rendimiento.

¿Qué opináis?